Cómo Comenzó Todo
En 2018, mientras trabajaba como consultora financiera en una mediana empresa de A Coruña, me di cuenta de algo que me llamó mucho la atención. Veía constantemente cómo las pequeñas y medianas empresas luchaban con software financiero complejo y costoso que realmente no necesitaban.
La mayoría de estos negocios tenían necesidades financieras claras pero específicas: control de flujo de caja, seguimiento de gastos, proyecciones simples. Y sin embargo, les vendían sistemas enormes con funcionalidades que nunca usarían.
Fue entonces cuando decidí enfocarme en algo diferente. Las hojas de cálculo, cuando se diseñan correctamente, pueden ser increíblemente poderosas. Son flexibles, familiares para la mayoría de los usuarios, y no requieren licencias costosas ni actualizaciones constantes.